miércoles, 11 de enero de 2012

10/01/2012. A las duras y a las maduras

Mucha niebla, así se resume mi visita de hoy a la R.N. Lagunas de Villafáfila. Una niebla agarrada al suelo, fría, gris en vez de blanca y "meona". De hecho, había más niebla cuando me fui (12:45 h.) que cuando llegué (09:15 h.). La temperatura entre los -2ºC y los 0ºC aunque con la niebla tan cerrada, la sensación de frío no era tanta.
Es muy bonito ponerse a escribir y contar que he visto tal o cual especie rara o poco habitual por aquí; o que había no se cuantos pájaros de tal especie, récord para la zona; o que ha criado este año, por "nosecuanta" vez tal gaviota; o que tengo fotos chulas de un "alicuéncano" (como diría mi amigo Chopito). Pero muchos días nos vamos "bolos" que dirian mis "queridos" cazadores y cuando tienes un blog dedicado al tema, encima, hay que contar algo. Pues, aunque Villafáfila es un pozo sin fondo para el tema bloguero, hoy no tengo nada salvo imágenes de una niebla que alguno desde el calor de su casa denominará como preciosa. En esta primera: "The Walking Dead". Otero de Sariegos debería estar delante pero...
Zona de La Rasa, en la Salina Grande, lugar desde donde debería ver gansos y otras anátidas...
Los pinos de Las Salinas, en Villarrín de Campos, hogar de búhos chicos, y de algún azor en invierno.



Detalle de la cencellada. Denominamos así a la congelación del agua de niebla.
Y, como este es un blog de bichos, gansos en la laguna de San Pedro, en Villarrín de Campos. Solo se veían los que estaban más cerca del observatorio.

Y uno de los fijos en su posadero, al cual tengo medio amaestrado.

Pero hay que estar a las duras y a las maduras. De todas formas prefiero algún día de estos antes que estar en casa aburrido. Ya vendrán días mejores.

5 comentarios:

  1. Pues para los que somos de costa, Adolfo, no te creas que la niebla castellana no tiene su magia.
    La primera vez que ví la "cencellada" fué en el pinar de Salinas. Para este ferrolano fue un concepto totalmente nuevo, el ver las gotas de agua congeladas en las hojas de los pinos piñoneros (que también souponen un exotismo botánico para nosotros).
    En aquella ocasión, la observación de avifauna no brilló precisamente, pero guardo un bonito recuerdo de la imagen de la "cencellada" en esa, tu tierra, tan hermosa en invierno (aunque, si tengo que elegir, me quedo con la primavera, por supuesto)
    Un saludo

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  2. Preciosas imagenes y paisajes de encanto invernal de la llanura, que suerte el poder ser testigo habitual de sus cambios!
    Saludos camperos!
    (por cierto si te interesan las fotos con "miga" y no fotos esteriles te invito a mi ultima entrada.............

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  3. Pues a mí los días de niebla, me parece todo más salvaje, me emociona salir al campo esos días plenos de silencio y misterio. Saludos

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  4. Ahora y en nuestra querida tierra de campos es lo que toca.
    Un saludo desde Pucela.

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