29/10/2012. Triplete: piquicorto, cariblanca y careto

No he podido empezar mejor la temporada "gansera" en Villafáfila. Después de varios días sin poder acercarme y con el nerviosismo que sentimos los pajareros en estos días de migración (ni que nos fuera a caer algo del cielo...) acentuada, además, por la ola de frío temprana que nos ha llegado desde el centro de Europa y por las noticias que me iba dando Cristian de que: "no hacen más que llegar gansos y grullas a la Reserva", pues ya se había convertido en una penitencia el no poder acercarme.

Pero unos días compensan a otros y, después de horas de trabajo y pasar un fuerte costipado, amanecí hoy en uno de esos días gloriosos que me regala mi querida Reserva. El sol limpio sobre el cielo, ni una nube, la primera helada importante del año (-2ºC a las 08:30 h.) y... ¡todo lleno de pájaros! Este invierno ya se ve diferente al pasado en el que no tuvimos ni grupos importantes de aláudidos. Los barbechos, praderías, rastrojos y demás están llenos de alondras y bisbitas que buscan su sitio. De fondo solo hay un sonido, el de los gansos entrecortado, de vez en cuando, por el trompeteo de algún bando de grullas, las únicas capaces de enmudecerlos. En los pocos lugares con agua, está todo lleno de patos. El número de avefrías que sobrevuelan los campos de labor es importante y... ¡rapaces! muchas rapaces (hasta 8 especies diferentes he visto hoy).

Como guinda del pastel, me he encontrado con dos amigos gallegos asíduos a Villafáfila, Encarna González y Gustavo Ferreiro. Siempre es un placer encontrarte con amigos y, si son pajareros y estamos en el campo, mejor que mejor.

Paso a detallarlo todo.

Sin duda debo empezar por los que han sido y serán los protagonistas de los próximos meses, los gansos. Entre los miles que había hoy (he calculado unos 4.000, lo que me parece un buen número para la última semana de octubre) he localizado a las primeras estrellas del año, esos infiltrados que nos hacen repasar los grupos de miles y miles de individuos, durante todo el invierno, en su busca.

El primero ha sido un ánsar piquicorto, un ejemplar joven de este año. Creo que se trata del primer piquicorto que veo en octubre en toda mi vida, con eso os lo digo todo. Estaba en un grupo de unos 1000 gansos en las zonas altas de la laguna de Barillos. Me ha sido imposible hacerle una foto por la distancia y el contraluz.

El segundo ganso protagonista ha sido una barnacla cariblanca que se encontraba con un grupo de unos 400 ejs. de ánsar común, a 1 km aproximadamente del anterior. A esta sí le he podido hacer algo más porque la distancia era algo menor. Primero posada y luego en la levantada, aquí tenéis a mi primera barnacla del año. Siento la pésima calidad pero se la ve bien.

 

Y la tercera estrella del día en cuanto a las grandes anátidas, ha sido un ánsar careto, adulto. A este también he podido tomarle una imagen testimonial, esta vez, mediante digiscoping. Estaba en los alrededores de la laguna de El Roal.

En el mismo grupo que el careto he leído también mi primer collar de ánsar común, azul oscuro SHJ. Cuando tenga algo os lo cuento.

Otro protagonista de la Reserva en estos días, la grulla común. Hoy he estimado unas 1000 preciosidades de estas que, seguramente, aumentarán los próximos días. Te sobrevuelan la cabeza grupos pequeños cada poco y se van juntando en los bajíos de Barillos, su lugar de alimentación favorito en el complejo lagunar. Creo que nadie puede quedar indiferente ante el paso de uno de estos grupos y su alegre trompeteo. Unas fotos.

 

 

 

 

Hace muchos años, un conocido ornitólogo europeo que visitaba con frecuencia la Reserva dijo que Villafáfila era de los pocos lugares del Mundo donde podías tener, a la vez en el telescopio, una grulla, un ánsar común y una avutarda. No se si será del todo cierto pero cada vez que visito el lugar que véis en la foto siguiente, intento meter en el telescopio esas tres especies en estos días de octubre-noviembre y no es difícil hacerlo... Los tres grandes de aquí.

Unas grullas con gansos volando de fondo.

Voy a daros unos números para que veáis como ha ido aumentando la cosa estos días. Si hace nada apenas teníamos un par de tarros blancos, hoy he contado 32+4, o sea, 36 ejs en total. Esto ya va siendo lo normal aunque, si hay agua, pasarán más del doble de este número. He anotado mi primer ejemplar de la subespecie inglesa de lavandera blanca del presente invierno. Los escribanos palustres ya son patentes en la zona de la balsa y en la laguna de La Fuente y he podido disfrutar de un precioso alcaudón real intentando cazar trigueros imitando a la perfección su reclamo desde lo alto de un taray. Esto, con los primeros rayos del sol de la mañana, es todo un privilegio (tengamos en cuenta que hablamos de mi pájaro favorito). Y, además, sigue el zampullín cuellinegro de la balsa de la depuradora con nosotros. Foto de hoy junto a un zampullín común.

Los limícolas quedan de la siguiente manera:

- Avefría europea: 800-1000 ejs. repartidos en varios bandos (Salina Grande, El Roal, La Rosa y Paneras principalmente) y ejs. volando en solitario por todos lados.

- Chorlito dorado europeo: 7 ejs. en la zona del puente romano.

- Zarapito real: 4 ejs. en la zona del puente romano.

- Chorlitejo grande: varias decenas en la Salina Grande que no conté.

- Correlimos común: varios ejs. en la Salina Grande que no conté.

- Correlimos menudo: varios ejs. en la Salina Grande que no conté.

- Combatiente: 13 ejs. en la Salina Grande.

- Agachadiza común: 1 ej. que se levantó de la balsa.

También 2 gaviotas sombrías y 1 gaviota reidora en la Salina Grande.

Como ya he dicho, 8 especies de rapaces. A parte de las más comunes en estas fechas he podido ver un águila real de 2ºc.y. y un par de halcones peregrinos, un adulto y un joven, este último el de la foto.

...y aguiluchos pálidos...

... y decenas de aguiluchos laguneros...

 

Y, como no, esos otros habitantes que están ahí aunque no los noticiemos todos los días, como esta pareja de cuervos que venía "caliente" de azuzar a la real que ya estaba lejos.

Preciosa mañana pero tengo el antojo de pasar un día próximamente de sol a sol, como hace años (las responsabilidades no son las mismas que entonces, obviamente...).