Mis planes para hoy eran pasar la tarde en Villafáfila, con mi pequeño Diego, y luego ir a refugiarnos en las faldas de la camilla con brasero de mi abuela, en el cercano pueblo de Pajares de la Lampreana. Justo un par de horas antes de ir, recibí un mail diciéndome: "Hay un pato colorado en las lagunas de la Casa del Parque". Iba a ir igual, como he dicho, pero esto incentivaba de narices...
Para que os hagáis una idea, a pesar de ir camino de las 300 visitas a este enclave en toda mi vida, jamás había podido observar esta especie aquí. Vamos, que el pato colorado Netta rufina, es mucho más raro que muchos de los gansos más escasos a nivel nacional, por no hablar de los que son considerados rarezas por el Comité de Rarezas de SEO/Birdlife.
Es, quizá, una de las especies que más ganas le tenía ya que se había citado en la Reserva alguna vez. Para mi lista de aquí hace la especie número 226 y, por supuesto, me cuenta para mi participación en el Big Year (categoría local patch) haciendo la especie número 215.
No es la primera vez que lo veo en la provincia, eso sí, ya que pude observar un ejemplar en septiembre de 2001 en una gravera inundada de Toro.
Según la bibliografía, en la R.N. Lagunas de Villafáfila se ha citado los años: 1979, 1985, 1986, 1998, 2003, 2004 y 2005. (Rodríguez y Palacios, 2006). Además, sabemos que hay otra cita en el embalse de Vega de Conde, en la sierra de Porto, a primeros de noviembre de 2000 y otra cita, sin concretar, en el Lago de Sanabria. Por tanto, si no hay más por ahí (que podría ser), y no hay nada duplicado o años en los que se hayan visto más de uno este sería, aproximadamente, el 11º para la provincia.
Para que apreciéis su índice de rareza a nivel provincial lo compararemos con el ánsar piquicorto, ganso incluido como rareza nacional en la lista de las aves de España en su última versión, de 2012. De piquicorto se han anotado en Zamora la cantidad de 48 ejs. hasta el año 2007. Es decir, el pato colorado es 4 veces más raro en Zamora que el ánsar piquicorto. Con estos datos, espero, entenderéis mi alegría por la observación.
Os dejo unas fotos, es un macho. Si aguantara, que lo dudo, veríamos un pato precioso, una vez que adquiera su plumaje nupcial de adulto.
La tarde no daba para mucho más. El coloradete solo se dejó ver esporádicamente y costaba disfrutarlo, ya que se movía en una zona de entre islas. Además el día ha estado muy gris y con un potente viento del Oeste que lo ha hecho muy desapacible.
Hay una importante entrada de fochas y también los primeros porrones que pasarán el invierno con nosotros, tanto europeos como moñudos.
En esta imagen, un macho de ánade rabudo que había en una de las lagunas.
Y, también, un par de cormoranes sedimentados, escasos aquí. Este es uno de ellos.
A Diego se le antojó hacerse una foto con el mítico ganso de metal que tienen en la entrada a la Casa del Parque. La primera vez que se hizo una foto encima de él no llegaba con los pies al suelo. Hoy ya hace el macho montés encima de él...
Nos fuimos a Otero a merendar, ver el atardecer e intentar disfrutar de la entrada de las grullas. Merendar, merendamos pero a "caraperro" ya que el viento y el consecuente frío se volvieron insoportables y, aunque íbamos bien abrigados, a partir de cierta hora en esta época del año, no merece la pena estirar más. La estepa es así de dura. Esta imagen trasmite todo el frío del mundo...
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