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martes, 30 de agosto de 2016

28/08/2016. Limícolas por Ricobayo

Ya tenía ganas de toparme con una buena mañana de limícolas en este postnupcial.
El pasado día 28 madrugué -demasiado pues me tocó esperar casi media hora a poder ver algo decentemente- en previsión de que era domingo y el embalse de Ricobayo se llenaría rápidamente de pescadores. Cuando estos empezaron a ocupar las orillas de manera masiva yo ya estaba recogiendo mis bártulos y volviendo para casa, sobre las 11:30 horas.
Hice la ruta habitual por las orillas de los términos de Montamarta y San Cebrián de Castro. Dejé este último lugar para el final porque la zona buena para limícolas está aún inaccesible para los coches de los pescadores, lo que me daba más tiempo. Es una gran isla que, aunque ya está unida a tierra, el barro aún no soporta el peso ni de una persona, por lo que no se puede cruzar. Si todo es normal, pasará aún casi un mes hasta que me encuentre con coches en el lado exterior de dicha isla (para entonces no será tal ya), lugar conocido entre el gremio para ir a pescar anguilas.
En vez de contaros las observaciones por orden cronológico, voy a empezar por mi grupo de aves favorito dando los totales entre los tres puntos de observación (cola y zona del ensanche de Montamarta y orillas de San Cebrián).
En este día anoté un total de 12 especies de limícolas, arrojando los siguientes números: cigüeñuela común (1), chorlitejo chico (sin contar, abundante y aún se ven pollos pequeños), chorlitejo grande (26), avefría europea (81), correlimos común (18), correlimos zarapitín (11), correlimos menudo (21), andarríos grande (1), andarríos chico (muy abundante), archibebe común (3), archibebe claro (1) y aguja colinegra (1).
El grupo más chulo me lo encontré en las orillas de San Cebrián, como ya he dicho. Aquí se han formado unos playones de limos que están en un momento ideal para albergar a estos pequeños viajeros.
Grupo mixto de limícolas con correlimos zarapitín, correlimos común y correlimos menudo.

Este lugar, si madrugas, es muy tranquilo, la luz es ideal y, si pillas un grupo formado principalmente por aves jóvenes, como era el caso, solo hay que buscar el ángulo correcto, medir la distancia, hacerte un ovillo y se hace la magia...
Correlimos común entre dos correlimos menudos.

Dos correlimos comunes y un menudo.

Correlimos menudo.

Grupo de correlimos menudos.

Correlimos zarapitines, preciosos juveniles escamados.

Correlimos zarapitines.

Chorlitejo grande, adulto.

Cigüeñuela común.

Estos son dos de los macarras que pueden echarte todo a perder, jóvenes de archibebe común. Desconfiados, escandalosos y traidores que te delatarán en cuanto tengan oportunidad.

Además de los limícolas hubo otras muchas aves de interés para la ornitología zamorana. Especies que seguimos con especial cuidado para tratar de definir su estatus exacto en nuestra provincia y así controlar a la perfección su fenología, con sus picos de paso, sus relaciones con la climatología, sus patrones migratorios, sus zonas óptimas de descanso, etc...
Anoté 4 gaviotas patiamarillas y 2 gaviotas sombrías, por ejemplo.

Junto a ellas descansaba un nutrido grupo de cormoranes entre los que había uno anillado. Estaban bastante lejos y me fue imposible hacer una lectura completa, solo lo que véis en las fotos. Aún con esto, mi amigo Antonio Gutiérrez me dice que es francés y que tratará de esclarecer algo más la cuestión a ver si, por lo menos, podemos llegar a la localidad donde fue marcado, aunque no podremos individualizarlo.

Entre el grupo de 12 espátulas de hoy en San Cebrián -más 1 que había en Montamarta- también me encontré un par de ejemplares anillados.

Como véis en la imagen, uno de ellos solo porta anilla metálica, por lo que será imposible saber nada. El otro lleva un código de anillas de pvc de colores que sí que nos permitirá saber de donde procede.

También de interés la presencia de 2 tarros blancos en el mismo lugar donde hace dos semanas había visto un juvenil. Los de hoy eran un adulto más un juvenil, este último seguramente el de entonces. No me dejaron ni intentarlo.

Como es típico de estas fechas, apunté 6 garcetas grandes. Esta es una de ellas.

Y, como no, nuestras queridas gitanas, las cigüeñas negras en su lugar habitual, antes de que llegara la marabunta de pescadores. Hoy solo vi 2 pero me consta que había algunas más.

Otros números totales interesantes: garceta común (15) y gaviota reidora (148).
A primera hora, ya con la tortura de los disparos de los matafauna a tope en el ambiente, un joven azor se soleaba en un rastrojo pero no me dejó ni parar el coche siquiera. 
Este grupo de perdices rojas formado principalmente por juveniles, se alimentaba cerca de la orilla bajo la atenta mirada de uno de sus progenitores. En pocas semanas serán ellas las perseguidas por los que hoy matan codornices y tórtolas a diestro y siniestro desde antes de que salga el sol.

Volviendo a casa hice una parada técnica en las graveras de Coreses donde lo más interesante fue: garceta grande (1), espátula común (5), martín pescador (1), agachadiza común (1), correlimos menudo (1) y avefría europea (+110 ejs.). Por supuesto sus habitantes habituales como avetorillos, andarríos grandes y chicos, chorlitejos chicos, aguiluchos laguneros, etc...
Esta era la garceta grande, que lleva un par de semanas, como mínimo, por allí.

miércoles, 3 de agosto de 2016

01/08/2016. Villafáfila a tope de aves

Después de unas semanas de descanso vuelvo a Villafáfila. Comienza agosto y tenemos bastante agua para lo que sería normal aquí (sequía total), así que debemos aprovechar la oportunidad que se nos brinda para saber que pasa por la Reserva si hay agua en verano. Es cierto que si no empieza a llegar alguna tormenta estival de esas que dejan muchos litros en poco tiempo, creo que acabará secándose del todo pero, es lo que corresponde con el ciclo biológico del lugar, así que chitón.
Las abundantísimas lluvias de la pasada primavera no solo trajeron mucho agua al lugar sino que favoreció la llegada de peces de manera masiva que debieron remontar desde el Duero, primero por el Valderaduey y, después, por el Salado, arroyo que nace en el complejo lagunar. Ahora que se está secando están quedando atrapados miles de ejemplares y esto es, sencillamente, un maná para las aves ictiófagas -que se alimentan de peces-. La visión de la Salina Grande, única laguna que conserva agua junto con Barillos, es deliciosa para el ornitólogo. Miles de aves sedimentadas en el lugar, unas alimentándose de peces y otras de invertebrados acuáticos que también deben ser numerosísimos. Todas juntas forman una comunidad de bastantes especies, alguna de ellas en números altísimos.
Mirad las siguientes imágenes.

Hay tres especies, principalmente, que claramente se están viendo beneficiadas por la subida masiva de peces al lugar, como así atestiguan sus números:
Cigüeña blanca: 441 ejs.
Garza real: 64 ejs. (es mi récord personal para Villafáfila).
Espátula común: 56 ejs.
Además de las decenas de pagazas piconegras que también están pescando y que han dejado por unos días las capturas de invertebrados en tierra para pasarse a la dieta del alburno y el carpín. También 5 garcetas comunes.

La observación más interesante de la mañana ha sido la de un charrancito común que, seguramente, también es una consecuencia de la presencia de peces. Es la cita número 11 de esta especie en Zamora y el ejemplar número 19 que anotamos. Por cierto, la segunda observación en este 2016, después del que vimos Cristian y yo en primavera.
Pero estando ya en el mes de agosto, mi cabeza y mis ojos ya solo piensan en limícolas. Y con estos fue con los que empecé la mañana, sobre las 07:30 horas, desde el observatorio de Otero ya que el grupo que había tenía querencia por los limos formados en la esquina suroeste de la Salina Grande. Esto fue lo conté: avoceta común (+400), cigüeñuela común (+500), avefría europea (+300), chorlitejo grande (21), correlimos zarapitín (24), correlimos gordo (1), correlimos común (82), correlimos menudo (6), aguja colinegra (39), combatiente (5), andarríos grande (2), andarríos chico (7), andarríos bastardo (2), archibebe común (3) y archibebe claro (5).
15 especies ya el primer día de agosto nos hace albergar esperanzas en este paso postnupcial.
Una imagen de un plano general ya que la distancia a la que se encuentran no daba para más...

Seguramente los peces también tienen la culpa de la presencia de gaviotas grandes. Conté 8 patiamarillas y 10 sombrías, además de un par de centenares de reidoras. En la foto grupo mixto de patis y sombrías. Lo pequeño de en medio es un fumarel cariblanco, uno de los 4 que había.

Plano de la Salina Grande desde la balsa, con una gaviota sombría en vuelo.

Hay una guardería de unos 20 jóvenes zampullines cuellinegros nacidos aquí. También han criado muy bien las fochas, de las que debe haber entre 200-300 ejs. solo en esta parte de la Reserva.
Respecto a las anátidas, también lo llenan todo: ánsar común, tarro blanco, ánade azulón, ánade friso, cuchara común, cerceta común (1) y porrón europeo.
Pareja de tarro blanco.

Jóvenes de porrón europeo nacidos en la balsa de decantación de la depuradora. Alguno de ellos no volaba aún.

Y el elenco de rapaces es el típico de las fechas, aunque eché de menos alguna culebrera. Así anoté: milano real (1), milano negro, aguilucho lagunero, ratonero, cernícalo primilla y cernícalo vulgar.
Dos jóvenes laguneros, seguramente hermanos, se disputaban restos de un conejo y cada uno se escondía entre la hierba reseca con la esperanza de que no lo encontrara el otro y poder comer a gusto.

Los cernícalos vulgares se han visto beneficiados por la instalación de cajas nido. Implacable raticida.

En esta época del año, con las aves mudando y preparando su plumaje para pasar el invierno, algunos individuos están horribles. Esta urraca parece que se había pasado este último fin de semana...

Y esta corneja advertía de mi presencia a mi llegada al observatorio de Otero.

Llevo muchos años acudiendo a este maravilloso lugar. Así que por mucho que quiera pasar desapercibido el mochuelo, voy a acabar viéndolo con bastante probabilidad.

Y con tanta cigüeña, cualquier posadero es bueno para descansar un rato.

Ahora sí, el postnupcial se ha desatado. A ver que nos depara...

martes, 26 de abril de 2016

25/04/2016. Agujeta escolopácea en Villafáfila

Bien pues, una nueva primavera en Villafáfila, y un nuevo yankee entre nosotros.
Ayer, 24 de abril, Carlos Villaverde y Tino Fernández, descubrieron una agujeta escolopácea en una zona somera de la R.N. Lagunas de Villafáfila. Gracias a su audacia y prontitud tuvieron a bien avisar cuanto antes y, casi in situ, todos los pajareros zamoranos estábamos sobre aviso. Desde este mismo momento, agradecerles públicamente su gesto de avisar tan rápido. Gracias a esto, en pocos minutos, Cristian Osorio (residente en Villafáfila), ya la tenía delante. A partir de ahí hemos ido acercándonos varios a verla.
Yo he tenido que esperar hasta el segundo día para poder ir y, por suerte, la pude disfrutar bien y durante un buen rato.
La agujeta escolopácea Limnodromus scolopaceus es una nueva especie para la provincia de Zamora, la número 338 para la lista provincial. Además solo es el tercer registro para Castilla y León. Curiosamente el segundo de ellos se produjo en la provincia de León durante los primeros 10 días de este mes, como ya conté aquí.

Esta especie se distribuye por el Este de Siberia y parte de Norteamérica (Alaska y Canadá). Inverna al sur hasta el norte de Sudamércia y, sobre todo, América Central. ¿Qué hace aquí? Pues esa es la bella pregunta que tanto nos fascina a los amantes de las rarezas.
La lista de aves americanas vistas en Villafáfila ya es interesante, como poco, para ser una provincia de interior. Así, con esta, la lista de limícolas neárticos vistos aquí queda como sigue: chorlito dorado americano, archibebe patigualdo chico, agujeta escolopácea, andarríos maculado, correlimos pectoral y correlimos canelo.

El pájaro está precioso, adquiriendo su plumaje nupcial.

A parte de la agujeta, con la que estuve 3 horas, dió tiempo a disfrutar del estado de la Reserva junto a un par de amigos. Porque, como ya he dicho en algún foro, el lugar está INDECENTEMENTE lleno de pájaros. Creo que puede ser una primavera histórica. A ver si puedo hacer una jornada de sol a sol para conservarla en la memoria de por vida.
Entre lo que vimos hay varias cosas que podemos destacar. Cayó el primer vuelvepiedras de la temporada prenupcial. Por mi parte también los primeros chorlitos grises (10) y correlimos zarapitín (1). Además hay bandos potentes de correlimos comunes y chorlitejos grandes. Con ellos, archibebes comunes, combatientes, avocetas, cigüeñuelas y avefrías. También el primer grupo migrante de andarríos chicos (8).
Este año está siendo muy bueno de fumareles. Hoy contamos 34 comunes y 4 cariblancos. Pero para números tremendos, de hecho un récord personal, esos 38 somormujos lavancos; jamás anoté semejante número dentro de los límites de la Reserva. Esta especie se ve, sobre todo, en paso prenupcial pero siempre de manera escasa y puntual.
Entre los centenares de gaviotas reidoras y pagazas piconegras, una gaviota patiamarilla. Foto hipertestimonial.

Uno de los somormujos lavancos.

Tenemos unas 20 parejas de zampullines cuellinegros construyendo nidos y haciendo paradas nupciales.
Otras aves de interés fueron: espátula común (8), garza imperial (1) o halcón peregrino (1).
No dejéis de daros un festín de aves por aquí...

jueves, 8 de octubre de 2015

07/10/2015. Llegada de grullas a Villafáfila

Hoy volví a hacer el recorrido estándar por Ricobayo y Villafáfila. Ha sido pobre en general, la sequía sigue haciendo estragos. El embalse está bajo mínimos y las lagunas de la Reserva no tienen agua apenas. A pesar de las lluvias de hace tres días donde solo cayeron unos pocos litros. 
Aún así ha habido alguna novedad. Amanecí en el pantano pero voy a empezar por Villafáfila.
Sin duda lo mejor de la mañana fue el poder presenciar la llegada de un gran grupo de grullas. Entraron a la Salina Grande en tres grupos seguidos, haciendo un total de 94 ejs. Venían muy altas y fueron dibujando círculos en el cielo para ir descendiendo. No es la primera observación de la temporada, ya vieron un pequeño grupo hace unos pocos días.
El trompeteo de estas aves es sinónimo de otoño por estas tierras. Es uno de los primeros grandes avisos de que el otoño ya lo es.

Trazando grandes círculos en el cielo para ir descendiendo como paracaídas.

Y descenso hasta el suelo.

Tristemente se encuentran sin agua donde refrescarse. O llueve, o volveremos a tener otro pobre invierno, y ya son muchos seguidos...

A parte de las grullas, poco más que destacar. Muy pocos limícolas a pesar de que para ellos sí que hay un ambiente de limos generoso en esta zona de la Reserva. Los números de hoy son, literalmente, ridículos: chorlitejo grande (13), chorlitejo chico (3), correlimos común (8), correlimos menudo (4) y, lo más interesante, correlimos zarapitín (1). Esta última especie es más excepcional en octubre debido a que tiene el pico de paso postnupcial aquí en agosto y hasta mediados de septiembre. Aún con esto, las tengo más extremas, con una cita en noviembre (1999) y una en diciembre (2012).
Foto testimonial del correlimos zarapitín de hoy que estaba a casi 200 metros.

Justo antes de irme apareció esta joven espátula que me sobrevoló y fue a posarse a la otra punta de la laguna. Se buscará otro sitio porque aquí no podrá alimentarse.

También se ha notado aumento de anátidas, todas restringidas a la balsa de la depuradora. Había un nutrido grupo de cercetas comunes, cerca de los 200 ejs., unos 30 cucharas (algunos en la siguiente imagen), y una docena de frisos, además de azulones obviamente.

Con el sol de hoy volvió el movimiento de mariposas después de un par de días sin actividad. Esta mañana pude ver Pontia daplidice, Pieris rapae, Colias crocea, Polyommatus icarus y multitud de ejemplares de Carcharodus alceae que, además, es la primera vez que me la anoto aquí. 
Un ejemplar de este discreto hespérido.

Previamente en el embalse, a la altura de Montamarta, pocas novedades. Además me recibió una fina capa de niebla que lo cubría casi todo a primera hora, por lo que me dediqué a disfrutar de la berrea de los ciervos.
Sigue habiendo presencia de cigüeña negra pero hoy ya solo había un ejemplar. Quizá la última de la que disfrutemos este año. Como el pantano ha bajado tanto hay una diferencia de distancia de casi 100 metros desde el día en que empezamos a disfrutar de esta especie aquí, finales de julio, hasta ahora. Le hice una foto cuando el sol aún no asomaba.

Cuando llegué no había ni una garceta grande pero fueron llegando poco a poco hasta alcanzar los 10 ejemplares. Parecían venir procedentes de la orilla de Santa Eufemia del Barco.

Entre la novedades había una gaviota sombría más respecto a mis anteriores visitas, siendo ahora tres individuos (1juv.+2ads.) y las gaviotas reidoras solo eran 11. De limícolas conté un pequeño grupo de unos 10 chorlitejos grandes, hoy no había ni andarríos chicos. Los somormujos lavancos, en el momento de irme, eran 314; pero parece ser que es un lugar de reunión y van llegando durante la mañana, ya que se han contado por las tardes más de 500 ejemplares. Con este panorama me di la vuelta y me puse a mirar las hileras de vegetación que tenía a mi alcance, que tampoco es mucha a parte de algunas zarzas, rosales silvestres, carrascas y algún tojo, y a hacer listado de pajarillos. Triste también pero algunas especies tendrán interés fenológico. Lo que más me prestó fue un torcecuello y una bonita pareja de currucas cabecinegras.
Desde Montamarta me acerqué el pago de Valclemente, en San Cebrián de Castro, donde la tónica fue la misma. Lo más destacable aquí fue un grupo de 16 agujas colinegras en la cola del arroyo. Los azulones son muy abundantes en esta parte y deben rondar los 500 ejs. Entre ellos algún cuchara y conté las cercetas comunes, 29.
Y, como de costumbre, acabo con unas fotos de momentos de la jornada.
Aquí la niebla levantando sobre las orillas de Santa Eufemia.

Y cuando aún quedaba una poca apareció entre la espesura un pajarazo enorme. Un hidroavión de combate contra incendios a hacer una carga.